El Show de La Mejor
La energía de Acción de Gracias y el Feng Shui 2026: César Peimbert revela los secretos
César Peimbert explica cómo aprovechar la energía de Acción de Gracias, el Feng Shui y los movimientos astrológicos rumbo al 2026.
La energía cambia, se mueve, se abre y se cierra, y justo cuando el año está por terminar, César Peimbert llegó a El Show De La Mejor con Cynthia Urías, Andrés Salazar “El Topo” y Óscar Calderón “El Nene Malo” para soltar una guía contundente sobre cómo alinearnos con la providencia y preparar nuestra vida para la energía del Caballo en 2026. Lo que compartió fue más que un mensaje espiritual: fue una hoja de ruta para manifestar, proteger y armonizar cada área de la vida mientras atravesamos un cierre de año cargado de movimientos poderosos.
La energía de la gratitud y el impacto del 27 de noviembre
Peimbert comenzó asegurando que la gratitud es una fuerza colectiva capaz de abrir la puerta a la providencia: casa, comida, sustento y estabilidad. Esta energía se potencia durante el Día de Acción de Gracias y, según explicó, se conecta con un fenómeno espiritual que ocurrió hace más de 60 años: la aparición de la Virgen de los Milagros. Su promesa fue clara: quien rece su oración el 27 de noviembre a las cinco de la tarde recibirá aquello que le haga falta. Para Peimbert, esta fecha no solo es devoción, sino una verdadera ventana energética que sincroniza milagros.
El decreto “YO SOY” y la palabra gatillo “colibrí”: metafísica para tiempos de cambio
Para quienes no siguen festividades o religiones, el maestro recordó que el poder más grande está en la mente. De ahí su recomendación del decreto metafísico de Coni Méndez, basado en la invocación de la “Amada Presencia de Dios Yo Soy”. Este decreto activa la fuerza divina, ajusta lo inestable y permite que todo se acomode en sincronía perfecta, siempre cerrando con la convicción de que “hecho está”.
En paralelo, presentó la palabra gatillo “colibrí”, un código metafísico que, repetido 45 veces, simboliza que todo se resolverá en paz, armonía y tiempo perfecto. Es, según él, el antídoto ideal para la ansiedad, los ciclos pendientes y los problemas que se sienten fuera de control.
Movimientos planetarios: regresos del pasado, karma y portales emocionales
El 2026 no llegará solo: viene escoltado por movimientos astrológicos que ya se sienten. Urano en Piscis abre cuestionamientos espirituales, mientras la conjunción de Venus y Mercurio —sumada a la salida de la retrogradación— abre el portal para que personas del pasado reaparezcan. Peimbert aclaró que esto puede significar reconciliaciones, cierres emocionales o incluso el regreso de exparejas. A esto se suma la presencia de Lilit, la luna negra, relacionada con el karma y los hilos invisibles del destino, lo que explica por qué algunos sienten que otros “se salieron con la suya” o movieron energías densas. En este panorama, Peimbert insistió en el llamado a la introspección y a la autorreconciliación.
Feng Shui navideño: por qué debes activar al Lobo y al Búho en casa
El maestro también compartió su guía de protección para cerrar el año. El lobo, explicó, es el guardián contra adversidades, robos o personas malintencionadas. Y en 2026, año del Caballo según la astrología china, su energía se triplica gracias a la combinación Caballo-Lobo-Tigre, conocida como la tricombinación del fuego, que impulsa la realización de metas.
El búho o la lechuza, por otro lado, representa magia y visión. Durante los primeros meses, todavía influenciados por la energía de la Serpiente, el búho actúa como un ojo protector que bloquea envidias y energías discordantes. Peimbert sugirió incluir búhos blancos en la decoración navideña para activar esta protección.
Lo que viene para el Gallo y la Cabra rumbo al 2026
Dentro de la astrología china, Peimbert también adelantó pronósticos para dos signos: el Gallo y la Cabra. Para el Gallo, el año tendrá momentos de tensión porque su energía choca con la del Caballo; sin embargo, también se abrirá la “flor de romance”, lo que aumentará su carisma, oportunidades amorosas y hasta laborales. Si están casados, recomendó prudencia, pues ese magnetismo podría generar complicaciones.
En el caso de la Cabra, quienes tengan este signo en su pilar de salud podrían enfrentar procedimientos médicos o cirugías menores, pero todas con resolución positiva. El Caballo es su mejor aliado y facilitará soluciones rápidas, armoniosas y sin riesgos.
La visita de César Peimbert dejó una cosa clara: no estamos entrando a un fin de año cualquiera. Entre portales de gratitud, decretos metafísicos, movimientos planetarios y Feng Shui aplicado, la energía que llega es profunda y transformadora. Prepararse, alinearse y usar estas herramientas puede marcar la diferencia entre repetir un ciclo… o abrir uno completamente nuevo.