FRAGANCIAS

Dime cómo te sientes y te diremos qué perfume usaste y cómo influyó en tus sentimientos

Elige tu próximo perfume según cómo quieres sentirte.

Fuente: Producción La Mejor
Elige tu perfume según tus sentimientos.Fuente: Producción La Mejor
Escrito en NOTICIAS el

En el universo del bienestar personal, el perfume ha dejado de ser un simple accesorio para convertirse en una herramienta poderosa de conexión emocional. Lejos de ser solo un cosmético más, su impacto en el estado de ánimo es profundo, íntimo y, en muchos casos, transformador.

¿Por qué el perfume influye tanto en cómo te sientes?

Según un estudio de Stanpa (Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética), los españoles colocan al cuidado personal entre sus tres actividades favoritas para sentirse bien, justo detrás del ejercicio físico y la relajación. Y dentro de ese cuidado, el perfume ocupa un lugar destacado.

De hecho, después de los productos de higiene básica, el perfume es el cosmético más consumido, con un crecimiento del 11,3%. Su capacidad para mejorar el estado de ánimo supera incluso a productos de cuidado facial o capilar, posicionándose como una fuente clave de bienestar emocional.

¿Cómo se conecta el olfato con las emociones?

El secreto está en cómo el cerebro procesa los olores. El sentido del olfato tiene una conexión directa con el sistema límbico, la parte del cerebro que regula las emociones y la memoria. “Cuando inhalamos, millones de moléculas activan las neuronas olfativas, que envían señales al bulbo olfatorio”, explica el Dr. Claudio Fragola.

Desde allí, esas señales van a zonas clave como la amígdala y el hipocampo, asociadas a las emociones y los recuerdos. Este circuito directo explica por qué ciertos perfumes pueden hacernos sentir euforia, calma, deseo o nostalgia con solo una inhalación. Y también por qué perder el sentido del olfato puede afectar profundamente nuestro bienestar emocional.

¿El perfume puede cambiar tu día?

Sí. Al estar vinculado a la memoria emocional, un aroma puede despertar recuerdos vívidos e influir en el estado de ánimo de forma inmediata. “Cada persona tiene un bagaje olfativo único. Un mismo perfume puede evocar sensaciones muy distintas según la experiencia personal de quien lo huele”, señala Miguel Bartolomé, Brand Manager de Isolée.

Además, no se trata solo del olor en sí, sino del mensaje emocional que transmite. Elegir una fragancia es, en muchos casos, una forma de autoexpresión. “Nuestro perfume habla de nosotros. Cuenta al mundo quiénes somos o quiénes queremos ser”, añade Bartolomé.

¿Qué perfumes usar según cómo te sientes?

La relación entre sentimientos y perfumes se puede aprovechar para potenciar ciertos estados de ánimo. Aquí algunos ejemplos recomendados por expertos:

Si quieres relajarte…

Aromas como la lavanda, el incienso de Omán, el hinoki (ciprés japonés) o la naranja dulce ayudan a calmar la mente y reducir el estrés.

Si necesitas más energía…

Las fragancias verdes o cítricas son la clave. El limón, el pomelo, la menta, el eucalipto y aceites de pino o romero estimulan la concentración y aportan vitalidad.

Si deseas potenciar tu sensualidad…

Las notas florales como el ylang ylang o la rosa despiertan el sentimiento de atracción y refuerzan la seguridad en uno mismo.

¿Cuál es el perfume que te está influyendo hoy?

La próxima vez que te pongas perfume, piensa: ¿cómo te sientes? ¿Más alegre? ¿Más seguro? ¿Con nostalgia? Tal vez el aroma que llevas hoy tenga más que ver con tu estado de ánimo de lo que creías. Porque en cada fragancia hay un mensaje, una emoción, un recuerdo… y quizás, una versión más conectada de ti mismo.