Durante la noche del miércoles, una extraña neblina cubrió Guadalajara, sorprendiendo a los habitantes del Área Metropolitana. Según Protección Civil y Bomberos de Guadalajara, este fenómeno natural fue causado por una tolvanera, una intensa tormenta de polvo que se forma bajo ciertas condiciones climáticas y puede reducir drásticamente la visibilidad.
Las tolvaneras, también conocidas como "diablo de polvo", son remolinos de arena que se forman en condiciones de cielos despejados y fuertes vientos. Según la Organización Meteorológica Mundial, estos remolinos pueden levantar partículas de polvo, arena y otros pequeños residuos en una columna rotatoria de altura variable.
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Impacto y precauciones
En Guadalajara, los vientos con rachas de hasta 40 kilómetros por hora favorecieron la dispersión del polvo, creando una densa neblina. Este fenómeno es común en áreas secas y áridas, como la laguna seca de Sayula, donde las tolvaneras ocurren con frecuencia y pueden ocasionar accidentes viales debido a la reducción de la visibilidad. Es crucial que, ante la presencia de una tolvanera, las personas busquen refugio en interiores y eviten conducir hasta que las condiciones mejoren.
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Para protegerse durante una tolvanera, se recomienda:
- Cerrar puertas y ventanas.
- Utilizar mascarillas para evitar la inhalación de polvo.
- Si estás conduciendo, disminuir la velocidad y encender las luces del vehículo.
- En áreas propensas a este fenómeno, es importante estar informado sobre las condiciones climáticas y seguir las recomendaciones de las autoridades locales.
Las tolvaneras pueden parecer inofensivas, pero su impacto en la visibilidad y la calidad del aire puede ser significativo. Mantente alerta y toma las precauciones necesarias para evitar accidentes y problemas de salud relacionados con la exposición al polvo y arena.