Si te encuentras agobiado o agobiada por una deuda de una tienda departamental y te aterra la idea de ir a la cárcel, puedes respirar tranquilamente porque la legislación en México te ampara y prohíbe que te priven de tu libertad por deudas de carácter civil, como las que se generan por compras en tiendas departamentales.
Es común escuchar historias o rumores sobre personas que han sido encarceladas por no pagar sus deudas. Sin embargo, en la mayoría de estos casos, se trata de confusiones o de situaciones que no están relacionadas con deudas de tiendas departamentales.
¿Qué sucede si no pago mi deuda?
Aunque no te pueden encarcelar por esto, si hay consecuencias al no pagar los adeudos en una tienda departamental. Lo más probable es que la tienda te envíe cartas o te haga llamadas telefónicas para recordarte tu adeudo y te solicite constantemente el pago.
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Bien podrías ignorarlas, pero créeme que seguirá teniendo consecuencias. Ya que si continúas ignorando tus obligaciones, la tienda puede vender tu deuda a una empresa de cobranza y estas pueden ser más insistentes que la propia tienda e incluso pueden amenazarte con acciones legales.
Sin embargo, estas amenazas son ilegales y no tienen ningún fundamento legal, por lo que no irás a la cárcel como tal.
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¿Qué puedo hacer si me están acosando por una deuda?
Si te sientes acosado por una empresa de cobranza, lo mejor que puedes hacer es contactarte con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF).
La CONDUSEF es un organismo del gobierno mexicano que está facultado para atender este tipo de casos y ayudarte a resolver tu problema. Recuerda que en México, no te pueden encarcelar por deudas de tiendas departamentales y que si no puedes pagar tu deuda, es mejor buscar un acuerdo con la tienda o con la empresa de cobranza.
Es importante destacar que, si bien no te pueden encarcelar por este tipo de deudas, el hecho de no pagarlas puede tener otras consecuencias negativas, como:
- Dañar tu historial crediticio: Esto te dificultará obtener crédito en el futuro, por ejemplo, para comprar una casa o un auto.
- Ser embargado: Esto significa que un juez puede ordenar que te quiten bienes, como tu salario o tu cuenta bancaria, para pagar la deuda.
Por lo tanto, es recomendable que siempre trates de cumplir con tus obligaciones de pago. Ahora bien, si estás teniendo dificultades para pagar tus deudas, existen diversas instituciones que te pueden ayudar, como la CONDUSEF o el Instituto Nacional del Consumidor (PROFECO).