Lola Cortés vivió un momento de alta tensión emocional dentro de La Granja VIP: la actriz y cantante sufrió una crisis que combinó síntomas de ansiedad intensa con una reacción física que la alarmó y obligó a la producción a atenderla. Aquí te explicamos qué pasó, qué síntomas presentó y qué decir sobre su salud, siempre con base en los reportes públicos y evitando conclusiones médicas no verificadas.
¿Qué le ocurrió a Lola Cortés en La Granja VIP y qué síntomas presentó?
Los reportes difundidos por medios que cubren el reality señalan que, tras ser nombrada peona de la semana, Lola Cortés comenzó a llorar de forma incontrolable, presentó dificultad para respirar, tos y pensamientos negativos, signos que sus compañeros y seguidores interpretaron como una crisis de ansiedad. En videos de la transmisión 24/7 se aprecia cómo la actriz respira entrecortada y pide ayuda, mientras sus compañeros intentan calmarla.
Más tarde, en conversaciones dentro del programa, Lola relató que pasó la noche sobre pacas de paja y empezó a notar que los síntomas reaparecían al volver al mismo lugar. Esa experiencia la llevó a considerar que, además de ansiedad, podría estar enfrentando una reacción alérgica a la paja o al ambiente del establo; la producción incluso le facilitó medicación para la alergia. Varios medios que siguieron el suceso reportaron la combinación de síntomas físicos y emocionales durante los episodios.
¿Significa esto que Lola tiene una enfermedad crónica o un trastorno mental?
No hay información pública que confirme un diagnóstico crónico o previo de Lola Cortés. Lo que está documentado por la transmisión y por entrevistas dentro del reality es un episodio agudo: una crisis de ansiedad y una posible reacción alérgica desencadenada por las condiciones de la granja (paja, polvo, ambiente cerrado).
Los medios han recogido las declaraciones y el comportamiento observado, pero no se debe interpretar esto como la confirmación de un trastorno a largo plazo sin la opinión de un profesional de la salud mental. Manola Díez fue la figura central en la contención inmediata: se negó a dejar sola a Lola, la consoló, la acompañó con técnicas de respiración y le recordó que la producción le proporcionaría el medicamento necesario.
El gesto de Manola fue ampliamente comentado en redes como ejemplo de contención emocional en un entorno de alta presión. La producción, según reportes, garantizó atención y suministro de medicación para la alergia; no se ha confirmado la salida definitiva de Lola Cortés del programa, aunque algunos medios plantearon la posibilidad dependiendo de la evolución de su salud.
¿Qué podemos aprender de este episodio sobre salud mental?
Los realities expuestos 24/7 someten a los participantes a condiciones físicas y emocionales extremas: frío, polvo, tareas exhaustivas, falta de sueño y aislamiento pueden desencadenar o agravar episodios de ansiedad y reacciones físicas en personas sin historial aparente.
Ante un ataque de ansiedad o una reacción alérgica, lo prudente es: pedir ayuda, buscar un lugar ventilado, controlar la respiración y recibir evaluación médica. Los espacios de entretenimiento deben equilibrar el espectáculo con protocolos claros de seguridad y salud para sus participantes.