La alimentación infantil es uno de los pilares más importantes para el desarrollo físico y emocional de niñas y niños. Con el objetivo de combatir el sobrepeso infantil y la obesidad desde el hogar, la Procuraduría Federal del Consumidor, a través de su Revista del Consumidor, ha publicado una serie de recomendaciones prácticas para que familias y cuidadores puedan reforzar los hábitos saludables en casa.
Profeco subraya que la clave de una mejor nutrición para los niños comienza con acciones sencillas y cotidianas que, al ser consistentes, generan un impacto positivo a largo plazo. La responsabilidad recae principalmente en madres, padres y tutores, quienes son los modelos a seguir.
Una alacena saludable, el primer paso según Profeco
La despensa y el refrigerador son el punto de partida, lo que se almacena en casa es lo que, inevitablemente, los menores terminarán consumiendo. Por ello, la guía de Profeco enfatiza la necesidad de ser selectivos:
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- Limitar el acceso: Es crucial reducir al mínimo la presencia de productos con alto contenido de azúcares, sal, sodio y grasas saturadas, estos elementos contribuyen directamente al desarrollo de problemas de salud como el sobrepeso.
- Priorizar lo natural: La recomendación es llenar la vista y el alcance de los niños con frutas, verduras y cereales integrales, al estar disponibles y a la vista, se facilita que los pequeños opten por estas opciones más equilibradas.
Dos aspectos fundamentales para la alimentación infantil son el consumo de agua simple y la educación sobre nutrición. Profeco hace hincapié en el consumo de agua simple como bebida principal, esto no solo garantiza una hidratación óptima, sino que reduce significativamente la ingesta de azúcares añadidos presentes en jugos y refrescos, favoreciendo además la salud bucal.
Además, es necesario hablar de nutrición en casa para generar conciencia, explicar a los niños, con lenguaje claro y adecuado a su edad, los beneficios de una dieta variada y las consecuencias del sobrepeso, les otorga herramientas para tomar decisiones saludables desde temprana edad.
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Profeco fomenta el autocuidado por medio del movimiento
Un plan de alimentación infantil equilibrado debe ir acompañado de actividad física y el involucramiento de los niños en su propia alimentación.
- Actividad física diaria: Es vital incentivar el movimiento diario y establecer límites al tiempo que pasan frente a pantallas. Cuando los padres participan en estas actividades, se refuerza el hábito del ejercicio como un componente natural de la rutina.
- Niños en la cocina: La procuraduría propone involucrar a los menores en la preparación de sus alimentos. Permitirles elegir o ayudar a elaborar sus propias colaciones (siempre con supervisión) los motiva a explorar nuevos sabores, conocer ingredientes nutritivos y desarrollar mayor responsabilidad sobre su autocuidado.
- Porciones a la medida: Finalmente, Profeco recuerda a los cuidadores que las porciones de comida deben ser acordes a la edad y a las necesidades calóricas específicas de cada niño. Es importante variar las colaciones para evitar la monotonía y mantener el interés por una alimentación variada y completa.
Implementar estas sencillas estrategias en casa es la manera más efectiva de garantizar una nutrición en niños adecuada y prevenir riesgos de salud, asegurando un desarrollo pleno y saludable, esto de acuerdo a Profeco.